El cementerio de los libros olvidados es la tetralogía con la que Carlos Ruiz Zafón saltó a la fama y se convirtió en el autor más leído de la lengua española después de Miguel de Cervantes Saavedra, Todo un logro. Esta saga se compone de los libros ''La sombra del viento'', ''El juego del ángel'', ''El prisionero del cielo'' y ''El laberinto de los espíritus''. Cabe resaltar que existe un quinto libro en la saga, publicado en 2012 ''Rosa de Fuego'' nos presenta una precuela ambientada en la época de la inquisición.
Las novelas nos relatan las aventuras de Daniel Sempere y Fermín Romero de Torres por una Barcelona gótica llena de apariciones, escritor eres malditos y los monstruos de la dictadura de Franco. Zafón invita al lector a navegar en su laberinto literario develando sus fantasmas poco a poco, en sus palabras, cada libro es una entrada al laberinto y al final del recorrido, el lector podrá unir todas las piezas para resolver su complicada arquitectura.
Todavía recuerdo aquel amanecer en que mi padre me llevó por primera vez a visitar el Cementerio de los Libros Olvidados.
En el centro de su narrativa se encuentra el cementerio de los libros olvidados, una especie de biblioteca secreta poseedora de todos los libros del mundo y todas sus ediciones. Un concepto que nos recuerda el paraíso de Borges y es que Zafón no tiene miedo de mostrar sus influencias en sus novelas. En los primeros capítulos se describe como los personajes toman prestadas sonrisas de Alexander Dumas, repiten tramas de sus libros y mencionan autores famosos como Lewis Carroll. En el fondo esta es una saga sobre libros y sus autores, hablando de autores...
Los escritores en la Barcelona de Zafón son representados como almas malditas, muy acorde con su ambientación gótica que rosa lo sobrenatural. No como la visión juvenil de lo que es un escritor maldito, más bien, una persona realmente maldita, por sus circunstancias y sus decisiones, rara vez son modelos a seguir a pesar de lo entrañables que puedan llegar a ser. Estamos hablando de pactos fáusticos, mutilaciones metafísicas y enemigos del régimen.
Los autores de los libros olvidados obligan al lector a poner de su parte, a mitad de la saga se vuelve difícil seguirle la pista a estos escurridizos autores por que muchos de ellos utilizan seudónimos. Te recomiendo prestar atención.
Otra cosa que realmente me atrapó de las novelas es la forma que el autor utiliza el realismo mágico de modo que no estás seguro si realmente existen las cosas sobrenaturales en este universo o no.
Todo lo que sabemos es que existe un grado de metafísica que es capaz de alterar la realidad, una manera sutil recordarnos que los libros tienen alma y cierto grado de conciencia, incluso se dice que en el cementerio de los libros olvidados, son estos que escogen a sus lectores y no al revés.
La parte mala de la saga es que ya casi por el final, la historia se complica, se retuerce sobre si misma y nos obliga a replantearnos el estatus quo de nuestros personajes. Esto, a pesar de ser bueno, vuelve la lectura algo complicada de entender y puede ser pesada para aquellos que estén iniciando en la lectura, yo me tuve que leer dos veces el ultimo libro para entender de donde venían las deducciones y en que momento la balanza había cambiado. Finalmente es un reto que vale la pena tomar, los corredores por los que esta autor nos guía valen la pena, son hermosos, estrechos y retorcidos. Uno se pregunta que tanto es la intención del autor confundirnos.
Otra cosa que me gustaría resaltar es la presencia del fascismo en sus novelas. No todos los seguidores del régimen son malvados, pero el régimen en si es malvado y le da la oportunidad a monstruos de crecer entre sus filas. Es una critica sagas a la dictadura de los años sesentas en España y un recordatorio de por qué no debemos de darle foro a esas personas.
Si tuviera que darle una calificación a esta saga le daría un 8/10, en especial al final se siente el peso del recorrido y es verdad que varias partes de las novela pudieran ser eliminadas sin afectar la historia (relleno) pero al final se siente que realmente has entrado a un laberinto lleno de libros y sombras, has salido de el y no te queda nada más en la vida que volver a entrar.
Es una pena que Zafón nos halla abandonado antes de tiempo No te tocaba, carnal... Me pone triste saber que su pluma pudiera habernos dado otra trilogía más. Pero estoy feliz de poder recomendarles este nuevo clásico moderno. Parte de la literatura universal y que dentro de sus cuatro entradas es capaz de hablarle a toda la humanidad y de tocar todas las fibras de la que está echa nuestra alma.
Esta reseña se la dedico a Carlos Ávila, excelente compositor, hermano del alma y eterno amigo. Si alguna vez te quedas sin inspiración en tus notas, te recomiendo te adentres en la Barcelona de Daniel Sempere. No te arrepentirás.
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